Claudio Vallory y una emotiva despedida al periodista Carlos Tati Iglesias
Hasta siempre amigo La primera vez que entre a una redacción, me atolondró el trepidar latoso, intenso, rabioso, fulminante y muy estruendoso de la máquina de escribir.Pero ese monstruo tenia un comando. Un cerebro increíble, manos celeres, honestidad blindada, creatividad inmensa y un humor corrosivo, cínico, fulminante, que le permitía decir cualquier verdad y atenuar…
